Comodidad: Ya no es necesario cargar con las pesadas garrafas y botellas para tener agua de calidad disponible siempre ni tampoco preocuparnos por el reciclaje de las botellas de platico.
Ahorro: Se olvida de comprar y almacenar agua embotella para beber, ni de comprar agua para la plancha.
El único gasto que tendrá sera el del mantenimiento anual del equipo que suele costar unos 50€ / año dependiendo de la empresa que lo haga menos de lo que cuesta una botella de agua al día.
Ecológico: Estará contribuyendo con el planeta evitando el consumo elevado de botellas de plásticos