Cuantas veces al abrir el grifo de casa hemos encontrado el agua algo turbia otra veces bastante turbia sobretodo el primer chorro al levantarnos, la turbidez es causada por las substancias en
suspensión que lleva el agua. Estas substancias desvían y absorben la luz,
produciendo la turbidez. Éstas pueden ser desde materia orgánica (virus,
bacterias, protozoos y algas) hasta arcillas,
coloides o sales en suspensión
precipitadas.
La turbidez se mide en UNF (unidad
nefelométrica de turbiedad).
Actualmente la turbidez es uno de los
parámetros más importantes en la
calidad del agua, por su apariencia y
por su salubridad, ya que un agua con
alta turbidez puede presentar graves
problemas para la salud por presencia
bacteriana (por ejemplo
Cryptosporidium u otros microorganismos parásitos),
así como grandes dificultades para su
correcta desinfección. En la legislación
actual, su valor a salida de ETAP o depósito, no debe
superar 1 UNF.
En la Directiva Europea 98/83/CE, en su anexo 1, se indican los parámetros
químicos, microbiológicos, indicadores y radiactividad del agua potable.